Empolvarse de noches
Los espejos azules, insertos en la culebra ocre, resaltaban los amarillos de la temprana tarde, avanzábamos en sincronía sin ser conscientes, yo de mis pasos ni ella de su agonía, los tropiezos me despabilaban más por los ruidos que por lo sufrido; los ecos hacían llegar mis yerros antes que lograra amalgamarme con mi destino. Decidí jugar a que mis pies eran meteoros que deshacían charcos, envuelto de eyectas, los sonidos adelantados se devolvían para atenuar a sus consecutivos, me pregunté a quién frenaba yo y a mi quién me ataba, el espejo se regeneró disminuido, ennegrecido, el fango se me quedó como testigo, la serpiente seguía su reptación, con el caer de la tarde su piel mudaba de tonos raspándome con sus filos, eran las estrellas con sus brillos, en la noche olvidé los colores y afiné el oído, los ecos ya se habían ido, me volví transparente, diamantino, bañado de noche, serenado, bendecido.
Xotlatzin >< :>
jueves 27 de mayo de 2010; 21:26 hrs
September 24, 2010 at 8:14 AM
Desencadena en mi un flujo rotatorio, movimiento solenoidal quien disipa mi dimension, sin embargo siempre las estructuras nubosas; ocultan la visibilidad. Sin embargo la chinampa extrae en mi el circuito de mi mundo corporal.
Un abrazo con todo mi cariño Xotla.....
September 24, 2010 at 9:11 PM
Yenny, qué agradable nota has dejado en la Chinampa, las nubes también se alejan de ella de vez en cuando. Te devuelvo el abrazo con igual de cariǹo, espero que estés muy bien. Xotla.