El eterno retorno de Quetzalcóatl
Es una noche como lo hay muchas, la calle es la calle, y la vida se llena de cada día.
Un murmullo muy lejano baja por alguna colina, es Quetzalcóatl que anuncia su próxima venida.
Mi alma se regocija.-¿Tendrán sentido mis días?
Mi cuerpo se fortalece.-.¡Es la juventud, se aproxima!
Se desvanece la noche en vigilia del primer puente y llega por fin El guía y me toca y me dice.-Xotla, desde ahora tú eres el hacedor de ti mismo, el que se auto-vence, el que alguna vez yo decía.
Y despierto y renazco con olfato de sierpe y garras con plumería, y me elevo donde el aire es ligero y me precipito en picada sobre mis dogmas tullidas.
Ensangrentado de mi mismo devoro mis corazones, flores de tuna aterciopelada vibran en el fresco fluir de la noche.
Es una noche como no hay muchas,
la calle siempre será la calle,
y la vida se llena de sí misma en una lucha perpetua,
en un presente liberado del tiempo,
en un por fin ser, de días nocturnos y perpetuas renacidas.
Xotlatzin
7/24/06
22:32
0 comments: to “ El eterno retorno de Quetzalcóatl ”
Post a Comment